Después del
período vacacional, a algunos niños se les dificulta retomar las rutinas que
implica el regreso a clases. Te ofrecemos algunos consejos para prepararlos.
Es muy común
que durante las vacaciones los niños cambien sus hábitos en lo
referente a los horarios de sueño,
las comidas y el tipo de actividades que realizan. Por eso, es
importante prepararlos para el
regreso a clases con una o
dos semanas de anticipación y evitar así, dificultades que puedan afectar su
desempeño en la escuela más adelante.
Para volver
a la rutina es importante decirles a los niños que pronto comenzarán las
clases, lo que significa volver a dormir
temprano, asistir al colegio, hacer las tareas, etc.”.
Te recomendamos
asignarles algunas actividades unos días antes, para que la preparación sea progresiva, por ejemplo: recoger
los libros nuevos en el colegio, forrarlos y revisarlos ayuda a que los niños
asuman el regreso a clases.
Una parte importante de esta previsión
consiste en explicarles a los niños por qué es necesario que hagan las cosas y
aprender a negociarlas: los niños son muy inteligentes. Así que deben
prepararse como el resto de las personas cuando vienen de vacaciones. Es decir,
poco a poco, porque la imposición de un horario de forma abrupta es algo que
tienden a rechazar.
La mejor forma
de negociar con ellos es hacerlo de acuerdo a sus gustos, y así, dependiendo de
los horarios que queremos que cumplan, empezar por lo más fácil. Por ejemplo:
“Vemos una película y luego dormimos”. Platica mucho con ellos y llega a
acuerdos mutuos ese es el mejor punto de partida.
Los refuerzos positivos siempre son mejores
que los negativos; por lo que resulta más efectivo negociar con premios que con
castigos. Sin embargo, lo más importante es convencerlos de que lo que están
haciendo trae beneficios para ellos. Los niños necesitan orden y estructura, sobre todo para moldear futuras
conductas que los conviertan en personas
maduras, independientes y capaces de organizar su propio tiempo.
¿Por qué es
importante que retomen los horarios?
Dormir bien y durante el tiempo suficiente, es muy
importante para que los niños retomen la rutina de levantarse temprano y para
que no vean afectado su rendimiento escolar. Así, los expertos recomiendan que
desde una semana antes del regreso a clases, se vuelvan a acostar temprano para que retomen el horario. La hora
antes de dormir es también una buena oportunidad para hablar con ellos acerca
de sus expectativas.
Recuerda que hay que levantarse con tiempo suficiente para desayunar de manera nutritiva
y balanceada, eso ayuda a que los niños se concentren más fácilmente en sus
clases. Es recomendable mandarles un lunch para que lo consuman a media mañana
y retomen la energía suficiente para continuar con el resto de sus actividades.
También es importante buscar siempre la oportunidad de comer en familia; este tiempo
es muy valioso para hablar con ellos acerca de las buenas y malas noticias que
ocurrieron en la escuela.
En cuanto a las tareas, hay que hablar con
nuestros hijos acerca de qué momento del día es el mejor para dedicarle tiempo
suficiente y de calidad a esta actividad: después de comer y de jugar un rato o
antes de salir a jugar. Lo importante es que el horario acordado sea respetado.
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